T Magazine es la revista en papel del New York Times. Centrada en estilo y cultura, se publica mensualmente y yo tengo el placer de escribir un artículo en cada número de su edición española. Mis trabajos para la revista giran entorno a lo que más me gusta, proyectos creativos de Madrid. Cuento la historia que hay detrás de pequeños comercios de autor, en los que el factor humano es el más importante.
Disfruto enormemente entrevistando a cada creativo, fotografiando su espacio y contando su historia.
T – Magazine
CLIENTE
T-Magazine
WEB
www.tmagazine.es
Categoría
Redacción + Fotografía
Una oda a la belleza de lo artesanal
Un espacio evocador donde la artesanía es la protagonista. Un retorno al pasado, a los objetos de toda la vida. Una alabanza a la tradición, al buen hacer y a la belleza modesta.
Fue el 23 de junio de 2017 cuando Cocol abrió sus puertas. Hasta ese momento, Pepa, formada en económicas, dirigía proyectos de equipamiento hospitalario a nivel internacional. Viajaba mucho y le gustaba su trabajo pero había una idea vaga y latente que hacía tiempo que le susurraba: esa belleza sencilla de los productos tradicionales y artesanales, la de los botijos, las boinas, la cerámica… objetos asociados a sus veranos, a la casa de sus padres. Una tarde, estando con una amiga en la Plaza de la Paja, en la Latina, su barrio de siempre, mientras sus hijas correteaban jugando, vio el cartel de se alquila de una antigua tapicería, un local muy bonito que conocía bien: Fue un flechazo, una corazonada. Me dije: ahora o nunca. Y lo alquiló.
Los meses que siguieron a aquella decisión fueron de mucho trabajo y, sobre todo, de trabajo en equipo. Amigos y familia se volcaron en dar forma a la idea y hacerla crecer ayudándola con el plan de negocio, los textos de la web, la decoración, traer producto… No habría podido montar Cocol yo sola, he tenido un montón ayuda y esto es una de las cosas que más aprecio de esta aventura: ver cómo la gente a tu alrededor colabora para que el proyecto salga adelante. Se ha ido tejiendo una red que sostiene Cocol.
En la tienda se encuentran boinas, botijos, sombreros, menorquinas, bufandas, bolsos de cuero, cerámica, tablas de madera, tejidos de lino, lana y algodón… producto artesanal de toda la vida, sobre todo español pero no únicamente, de empresas familiares que llevan muchas generaciones trabajando el mismo producto, o de gente joven que ha sabido unir tradición y modernidad, como las alpargatas de los valencianos couple&pie o el esparto de Silvia, de Balik y Popoy.
Para Pepa se trata de poner en valor la artesanía, ese es el porqué de Cocol. Apoyar a personas que hacen un trabajo de calidad, realzar la importancia de la buena materia prima y promover un consumo responsable, alejado de la inmediatez y del trabajo en serie en grandes cantidades. Me gustaría llamar la atención sobre objetos de mucha belleza que han estado ahí siempre y que parece que hemos olvidado.
Pepa ha sabido crear un espacio repleto de belleza discreta y buen hacer, acogedor y evocador, que te traslada de inmediato a un lugar y momento de tu memoria. Cuando entra alguien por la puerta y por un instante le haces recordar algo de su infancia: una casa, unos olores o texturas, una persona, y te lo cuentan, siento que lo estoy haciendo bien. Esto es, sin duda, lo más gratificante de Cocol.
Un espacio evocador donde la artesanía es la protagonista. Un retorno al pasado, a los objetos de toda la vida. Una alabanza a la tradición, al buen hacer y a la belleza modesta.
Fue el 23 de junio de 2017 cuando Cocol abrió sus puertas. Hasta ese momento, Pepa, formada en económicas, dirigía proyectos de equipamiento hospitalario a nivel internacional. Viajaba mucho y le gustaba su trabajo pero había una idea vaga y latente que hacía tiempo que le susurraba: esa belleza sencilla de los productos tradicionales y artesanales, la de los botijos, las boinas, la cerámica… objetos asociados a sus veranos, a la casa de sus padres. Una tarde, estando con una amiga en la Plaza de la Paja, en la Latina, su barrio de siempre, mientras sus hijas correteaban jugando, vio el cartel de se alquila de una antigua tapicería, un local muy bonito que conocía bien: Fue un flechazo, una corazonada. Me dije: ahora o nunca. Y lo alquiló.
Los meses que siguieron a aquella decisión fueron de mucho trabajo y, sobre todo, de trabajo en equipo. Amigos y familia se volcaron en dar forma a la idea y hacerla crecer ayudándola con el plan de negocio, los textos de la web, la decoración, traer producto… No habría podido montar Cocol yo sola, he tenido un montón ayuda y esto es una de las cosas que más aprecio de esta aventura: ver cómo la gente a tu alrededor colabora para que el proyecto salga adelante. Se ha ido tejiendo una red que sostiene Cocol.
En la tienda se encuentran boinas, botijos, sombreros, menorquinas, bufandas, bolsos de cuero, cerámica, tablas de madera, tejidos de lino, lana y algodón… producto artesanal de toda la vida, sobre todo español pero no únicamente, de empresas familiares que llevan muchas generaciones trabajando el mismo producto, o de gente joven que ha sabido unir tradición y modernidad, como las alpargatas de los valencianos couple&pie o el esparto de Silvia, de Balik y Popoy.
Para Pepa se trata de poner en valor la artesanía, ese es el porqué de Cocol. Apoyar a personas que hacen un trabajo de calidad, realzar la importancia de la buena materia prima y promover un consumo responsable, alejado de la inmediatez y del trabajo en serie en grandes cantidades. Me gustaría llamar la atención sobre objetos de mucha belleza que han estado ahí siempre y que parece que hemos olvidado.
Pepa ha sabido crear un espacio repleto de belleza discreta y buen hacer, acogedor y evocador, que te traslada de inmediato a un lugar y momento de tu memoria. Cuando entra alguien por la puerta y por un instante le haces recordar algo de su infancia: una casa, unos olores o texturas, una persona, y te lo cuentan, siento que lo estoy haciendo bien. Esto es, sin duda, lo más gratificante de Cocol.
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T Magazine es la revista en papel del New York Times. Centrada en estilo y cultura, se publica mensualmente y yo tengo el placer de escribir un artículo en cada número de su edición española. Mis trabajos para la revista giran entorno a lo que más me gusta, proyectos creativos de Madrid. Cuento la historia que hay detrás de pequeños comercios de autor, en los que el factor humano es el más importante.
Disfruto enormemente entrevistando a cada creativo, fotografiando su espacio y contando su historia.
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Redacción + Fotografía