Buen lunes! Pues sí, este fin de semana, y casi sin quererlo, ha estado lleno de visitas a diferentes mercadillos de la ciudad. Y me ha encantado!:)
Yo tengo una especie de obsesión por los mercadillos, especialmente los que se hacen al aire libre. Siempre que vamos de viaje a alguna parte, quien viene conmigo sabe que va a tragarse todos los mercadillos habidos y por haber de nuestro destino. No sé qué es lo que me gusta tanto… la gente paseando, el solecito que te da mientras miras tenderetes, el aparente desorden… tienen un nosequé que me encanta, los encuentro especiales.
Y este fin de semana hemos ido de uno a otro. Gracias a twitter, supimos que entre sábado y domingo había cuatro diferentes, así que hicimos selección, uno cada día (tampoco era cuestión de saturar al personal).
El sábado lo empezamos yendo a comer a un sitio francamente chulo y diferente en el Born, pero de este ya hablaré más adelante en otro post, porque merece la pena dedicarle uno enterito. Después de comer, íbamos de paseo por la zona y nos encontramos con la 18ª edición de la Fira per la Terra, que se celebraba los días 20 y 21 de abril en el parque de La Ciutadella, y que desconocíamos. Esta feria potencia la producción de bienes y servicios realizados con respeto a las personas y a los sistemas naturales, y apoya todo tipo de producción artesanal que sea respetuosa, de nuevo, con las personas y la naturaleza (para más información, clica aquí) Estuvimos paseando un buen rato entre tenderetes de comida (verduras, quesos, mieles, pan, embutidos,… prácticamente de todo) y de artesanía y ropa (había auténticas monadas!).
Cuando nos aseguramos de haber visto todas las tiendecitas de la feria, y después de ir a recoger el dorsal de la Cursa dels Bombers que Rícard corría a la mañana siguiente, fuimos hacia el bar-restaurante Havana Barcelona (Passeig Joan de Borbó, 74) que, de 15h a 21h, se convertía en el Fabulous Market Barcelona, un mercadillo singular, con prendas y complementos vintage y de algún diseñador. Fue curioso de ver, la verdad, y Rícard encontró una camisa muy chula por 10€ así que valió la pena ir y pagar el euro que costó la entrada (si alguien está interesado en este mercadillo, puede ir a la página que tienen en facebook donde, además de fotos del evento, hablan de próximas ediciones – la siguiente, en mayo -).
Domingo por la mañana, la gran carrera! Fue especialmente bonita de por el gran número de participantes y el montón de gente que había animando en la llegada (mientras los veía llegar y oía todos los aplausos y gritos de motivación incluso me llegué a plantear si YO podría correrla el año que viene) y, como ya viene siendo tradición, después de la carrera, desayuno a lo grande (cómo me gustan este tipo de tradiciones! :p) en el gastrobar Elsa & Fred, del que también intentaré hablar más adelante en otro post, porque es una cafetería interesante y bonita, y porque desayunamos muy bien (me encanta cuando se me acumula trabajo en el blog!).
Y por la tarde, y ya para rematar el fin de semana, nos pasamos por el Happy Market-After Tea, en el Ocaña Café (Plaça Reial, 13). Era un mercadillo de estilo parecido al del sábado, con ropa y calzado vintage, joyería y accesorios, amenizado con música, lo que en este, me imagino que por ser más grande el espacio, había más tenderetes (para más información, ir a su página de facebook). A pesar de no comprar nada, fue interesante verlo, sobre todo porque no solemos ir a mercadillos que se hagan aquí (curioso, no? me encantan los mercadillos, visito todos los que puedo cuando viajo y aquí muchas veces ni me entero de los que hay…).
Y hasta aquí el tour del fin de semana. Ha sido un fin de semana diferente y atractivo porque, a pesar de haber estado en la ciudad, hemos conocido muchas cosas nuevas y esto siempre me gusta. Además, el tiempo ha sido una auténtica delicia así que… qué más se puede pedir?
Feliz semana y feliz día de la Tierra!! 🙂
y sabe tan bien en estos días de primavera! *